DEL NICHO AL P�BLICO MASIVO Los hermanos Javier (35) y Alejo (33) Estebecorena son dise�adores; uno, industrial; el otro, de indumentaria. Hace ocho a�os armaron un estudio al que equiparon con una computadora comprada con el dinero que les prest� una novia. Empezaron haciendo trabajos para terceros pero hoy tienen su propia marca de ropa, HE (por Hermanos Estebecorena o por “�l”, en ingl�s, a gusto de cada quien). “Iniciamos este proyecto en 1999. Al principio vend�amos en el local multimarca Salsipuedes. Estuvimos durante dos temporadas hasta que decidimos mudar nuestro estudio y agregarle un local de ropa. Eso fue en 2001, un poco antes de la crisis de De la R�a. Sobrevivimos a puro sudor”, cuenta Javier. El negocio lo armaron en un local que fue panader�a de los cincuenta. “Estaba reventada, comida por las ratas, pero nosotros la recuperamos. Restauramos los muebles originales, hicimos la recomposici�n de una historia que tiene que ver con algo de panader�a, de sastrer�a, de oficina tambi�n. Es nuestra reinterpretaci�n pero respetando muchas cosas particulares”, explica en lenguaje de dise�ador. El ambiente que crearon llam� la atenci�n de unas cuantas publicaciones internacionales. “Cuando reci�n abrimos el local nos toc� el timbre una chica con acento ingl�s. Nos pidi� permiso para sacar una foto para la revista inglesa Spruce, una publicaci�n nueva de Wallpaper, m�s exclusiva todav�a. All� salimos publicados en una secci�n sobre Buenos Aires.” Tambi�n figuran en la gu�a inglesa Time Out, una especie de Biblia para los viajeros. Y hay m�s. “El otro d�a hablaba con un conocido que viven en Canad� y me comentaba que el domingo pasado hab�a le�do la secci�n de viajes de un diario de Toronto una menci�n acerca de Buenos Aires. Y nos nombraban a nosotros y daban nuestra direcci�n. Era una nota tomada del Washington post.” Los �xitos internacionales siguen: “Vinieron un d�a a sacarnos una foto de la revista inglesa ID. Pensamos que era una especie de concurso. Pero no, nos pusieron entre los cien dise�adores que van a cambiar el dise�o en los pr�ximos a�os. Estamos en el n�mero 57”. La gente que entra a ese local tan de dise�o es muy variada. “Son profesionales independientes de 20 a 50 a�os. La ropa no es cl�sica pero tampoco somos una marca que tenga como objetivo el cambio por el cambio mismo. Tratamos de encontrar soluciones a problemas que nosotros mismos nos planteamos. Por ejemplo, nuestros zapatos no respetan la forma de punta t�pica en la que el pie se tiene que adaptar al zapato. Buscamos una soluci�n est�tica que no niegue la forma natural del pie”. Hay 80 productos con la marca HE. “Una de nuestras caracter�sticas es que hacemos muchas cosas: ropa interior, camperas de cuero, pantalones, shorts, camisas, billeteras”. A pesar de que no les va mal con la marca propia, no abandonaron el trabajo para terceros. Con dos socias hacen dise�o gr�fico, industrial y de indumentaria para clientes como la Direcci�n Nacional de Museos, el hotel de Faena, Freddo y el Malba. Durante mucho tiempo exportaron sus prendas a Chile y Estados Unidos. “Vend�amos en locales de autor en Chicago, San Francisco y Nueva York”. Pero ahora est�n concentrados en el mercado interno. “Tuvimos una diferencia con nuestro representante y estamos buscando otro. Hay dos personas, una en Miami y otra en Londres que est�n empezando a trabajar con nosotros pero por ahora no exportamos”. En el mercado interno, hace poco estrenaron otro local, frente al hip�dromo de San Isidro. Tambi�n venden en el Free Shop de Ezeiza y est� por abrir una g�ndola de ropa interior en el Paseo Alcorta. Para este proyecto recibieron un subsidio del Gobierno de la Ciudad. “La idea es meter en el mercado masivo una l�nea de productos que hasta ahora estaba en un mercado selectivo”, cuentan los Estebecorena, que tendr�n que sumar al subsidio una inversi�n de 80.000 pesos. El logo de la marca es un ideograma japon�s que los hermanos eligieron sin saber c�mo se pronuciaba. Cuando averiguaron, se llevaron una buena sorpresa: se dice ji, que suena igual a “he” en ingl�s.

Cecilia de Castro Suplemento Econ�mico. Clar�n.